Expresar en palabras lo que una siente por dentro, es algo muy difícil, expresar luego algo que sientes, mirando a los ojos de otra persona, es realmente complicado. y si a todo esto le sumamos, que me da corte contar algo tan personal, son pocas las veces que me atrevo a hablar.
Mi problema es que no tengo valor, que tengo corazón, y algo de razón, pero el primero quiere obligarme a desaparecer y el segundo simplemente lo impide.
Un millón de palabras no pueden hacer que vuelvas. Lo sé, porque lo he intentado. Tampoco un millón de lagrimas. Lo sé porque he llorado hasta no poder más.
Tal vez lo único que duele más que decirte adiós es no haber tenido la ocasión de haberme despedido de ti.
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